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La luz de tu mirada y tu tierna sonrisa
es mi eterna alborada con tu fragante brisa.
Hoy que me encuentro lejos de ti, prenda adorada
mi mente enamorada te envía esta canción.
En cada verso lleva el solo pensamiento
de esperar el momento de estar junto a ti.
Y entre su melodía se encuentra el alma mía
para que al escucharla no te olvides de mí.
Las llamas del inmenso cariño que te tengo
se han avivado tanto, que ya no puedo más.
Que me parece un siglo que no veo tu cara
que no escucho tu risa ni tu voz angelical. |
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